viernes, 16 de julio de 2010

¡QUE TONTOS SOMOS LOS SERES HUMANOS! Y NO QUEREMOS DARNOS CUENTA.


El Objetivo es el Ser Humano, ¿pero quién nos odia tanto?

Últimamente, no sé, el porqué no queremos ver una lucha que se está desarrollando muy cerca de cada ser humano.

Las gigantescas marchas en España en donde todo un pueblo levanta las voces pidiendo que se respete los Derechos de los que están por nacer, las enormes manifestaciones en Argentina por que se respete el Derecho de las familias, las millonarias marchas en Colombia por la paz, en fin, las marchas en Malasia, en Italia, en Grecia, es decir en todo el planeta; pero, el punto es que no veo que nos pongamos a meditar sobre estos hechos, ¿Qué pasa? El mundo está convulsionado y no nos damos cuenta ¿Qué pasa?

Muchas voces cándidas que, cuando sus gobiernos empezaron a promover una reforma que afectaba su vida y sus derechos como el aborto las uniones homosexuales, entre otras, repitieron con fervoroso animo; ¨ Es una cortina de humo para distraernos de la crisis económica. ¨ Y ahora qué; por ejemplo, en España, el Consejo de Ministros presenta una subida de impuestos y un proyecto de ley que convierte el crimen del aborto en Derecho de la mujer, o en Argentina que se aprueba la Ley de las uniones homosexuales, sin darse cuenta de los extraños ingresos económicos de sus gobernantes, el ingenuo pueblo grita hasta desgañitarse, ¨ ¡Ya lo decíamos nosotros! ¡es una cortina de humo!

Seguramente si estas ingenuas voces hubieran vivido en la época en que el pueblo Azteca ofrecía en sacrificio a sus niños al dios de la lluvia, claloc, seguramente también habrían gritado ¡Es una cortina de humo!
Pero, en lo personal, yo sí creo que hay una cortina de humo, lo que pasa es que esa cortina de humo nubla la razón de las personas que ingenuamente, rayando ya en la estupidez, no se dan cuenta lo que en la realidad hay en el fondo de las medidas que toman sus gobiernos.

Para quienes tengan la razón medianamente clara, resulta notorio, que la coincidencia de ambas calamidades demuestra que comparten una misma naturaleza común, como las matanzas de los niños ante el altar de Claloc compartían una misma suerte con la situación de sequia del agro del Imperio Azteca. Sólo que la naturaleza compartida de ambas calamidades es de índole sobrenatural: los dioses Aztecas siempre exigen a sus adeptos, a cambio de poder, que les entregue su alma. Sin embargo, y como es lógico, nuestra época ha excluido de sus razonamientos el orden sobrenatural; y, al excluirlo, sólo puede aspirar a juicios sin fundamento, fragmentarios, de tal manera que las calamidades que afligen aparecen ante sus ojos desvinculadas entre sí, separadas por, ahora sí, verdaderas cortinas de humo que nublan la razón.

En la obra de C.S. Lewis de editorial Andrés Bello cita el proceso que, nublando la razón, acabará por convertirnos en seres humanos que ya ni siquiera merezcan el calificativo de humanos. Y que, expoliados de su raquítica condición humana, llegarán a aceptar como conquistas de la libertad o del progreso lo que no son sino disfraces descarados y sibilinos de su miserable esclavitud.
El aborto y las uniones homosexuales, son un real crimen que la razón o la lógica humana a todas luces repudia y cuando el hombre se desprende de la razón y de la lógica natural es como cuando la hojas se desprenden del árbol, y sabemos que no les aguarda otro destino que el final de su existencia y esto si tiene razón y por ende lógica natural.

¿Pero qué podemos esperar de una raza que se dedica a matar a sus nacituros y se une en una práctica que no se le puede llamar sexual, donde la procreación es nula? Y digo que no se le puede llamar sexual porque la palabra sexual implica una unión entre macho y hembra que supone un fin especifico, la procreación, lo que es una imposibilidad entre dos hombres o dos mujeres o entre dos pingüinos machos o dos cabras hembras o en su defectos entre dos pistilos o dos ovarios.

Teniendo en cuenta lo anterior, cuando el aborto o las uniones homosexuales se aceptan socialmente como una conquista de la mal llamada libertad o del ¨progreso¨ cuando se niega o restringe el derecho a la vida de las generaciones venideras dentro de una familia naturalmente constituida, nuestra propia condición humana se debilita hasta, simplemente desaparecer.
¨ Los que moldeen al hombre en esta nueva era - escribe Lewis en su obra – estarán armados con los poderes de un Estado omnipotente y una irresistible tecnología científica: serán una raza de manipuladores que podrán, verdaderamente, moldear la prosperidad a su antojo. ¨ y es lo que estamos presenciando de manera directa en España y Argentina, entre otros países.

Por su puesto, esa raza de manipuladores presentará sus manipulaciones como conquistas de la libertad humana, y si no abriguen sobre la lucha que ha estado librando Uganda en el África. ¨ Sabrán – continua Lewis – cómo concienciar y qué tipo de conciencia suscitar. ¨ Y como es lógico con la conciencia formateada, es decir, con la razón nublada, la manipulación es un éxito, para los manipuladores. Pero estos hombres, que han dejado de ser hombres o por lo menos humanos; se guiarán por voliciones, por meros impulsos caprichosos, y seguramente dirán ¨ yo quiero esto o lo otro donde esto y lo otro no es otra cosa que el aborto o cualquier otra irracionalidad.¨

Pero, ¿y qué ofrece el manipulador a los hombres que desea despojar de su condición humana? Se pregunta C.S. Lewis. Pues, lo mismo que Mefistófeles a Fausto: ¨ Entrega tu alma y recibirás poder a cambio. ¨ Que curioso, esto lo leí también en el Génesis de la Biblia, ¨ seréis como dioses. ¨ EL manipulador nos da poder para abortar, poder para unir un hombre con otro y una mujer con otra, poder para decidir en la vida de otros, pero, a cambio, nos exige que le entreguemos nuestra condición humana . Pero no podemos entregar nuestras prerrogativas humanas y, al mismo tiempo, retenerlas; o somos seres racionales, o nos convertimos en simples marionetas en manos de los manipuladores.
Hoy nos quitan el dinero y nos expolian los ahorros, y si no pregúntenles a los argentinos lo sucedido unos años atrás; mañana nos chuparán hasta la última gota de sangre. Para no comprender algo tan evidente, hace falta, en efecto, tener la razón nublada por un cortinón de humo. Y, por cierto, este cortinón apesta a azufre.
¿Pero, quien nos odia tanto?


Para mis hermanitos los A.E y los del ENS en especial el glorioso y los pequeñitos de los Martes

C. E. R

Que Dios los bendiga y la Virgen los proteja



No hay comentarios: