¿Qué está pasando? II

Al Hombre le han envenenado el pensamiento. ¿Entonces, cual es la verdad?

Es importante antes de continuar, sugerirles leer el escrito anterior para comprender lo que se presenta en esta oportunidad.

Para entender lo Fundamental, lo Urgente, y lo importante, debemos comprender, quienes somos nosotros, los hombres, los seres humanos, desde un único punto, el real, sin dejarnos arrastrar de los conceptos que nos brindan las ciencias positivas.

Puedo decir sin temor a equivocarme que durante siglos nos han sometido a vivir en una mentira sobre nosotros mismos, como si nos taparan los ojos para que veamos pero no observemos, nos tapan los oídos para que oigamos, pero no escuchemos, y nos tapan la boca para que, de lo observado y escuchado no lo expliquemos.

Y es que el hombre solo se puede entender razonando sobre él mismo; el pensamiento Aristotélico nos da las primeras ideas sobre el particular. Aristóteles no dirá nunca que el hombre tiene un Alma, tampoco dirá que se trata de una realidad divina caída del cielo, pero dirá que se trata de una síntesis de cuerpo y alma, perfectamente integrada en el mundo que le rodea, es decir, el hombre es un ser unitario, una substancia única.

Pero, se nos queda algo por fuera, una duda que de seguro nos preguntamos, ¿y, que es el alma? Valla, nos metemos en un lio, pero es lógico que debamos explicarlo.

Leyendo sobre el tema siempre interesante de la evolución del hombre; cuando termino el estudio, me deja un sinsabor y es que pareciere que algo falta en las respuestas ¿Cuándo empezaron a existir las dimensiones espirituales que caracterizan al hombre inteligente? Artiagas dice que probamente no lo sabremos nunca, y me temo que será así, pero es claro que el Homo Sapiens poseía todas las capacidades del hombre actual.

Lo que sí está claro en la teoría de la evolución de la cual discrepo enormemente pero que es menester de este escrito citarla, es que hubo un gigante salto ontológico y de discontinuidad en el desarrollo de la humanidad lo que pone en duda la teoría de la evolución. La capacidad abstractiva y la inteligencia o se da o no se da, pero en esto no cabe un término medio, es decir, no podemos explicar la evolución del hombre con una mera gradualidad biológica, y esta es la pared en donde se estrellan los evolucionistas.

En el hombre existe una dimensión espiritual que le permite captar y manifestar las emociones determinadas u orientadas por diferentes maneras de expresiones, un ejemplo de esto, son las diferentes maneras de expresiones artísticas, como la pintura, el teatro, la literatura. El simple hecho de imaginarse historietas en las que se plasma las sensaciones y caracteres de sus personajes definiendo sus conductas, permite reconocer que en el hombre existe una dimensión espiritual. Otro ejemplo es la relación entre dos seres humanos idénticos, los que llamamos gemelos, con una información genética idéntica pero su carácter, su personalidad es muy diferente.

La existencia del alma es irrefutable, pero, aun así la presencia de las evidencias sobre la existencia del alma, hay individuos que en abismal incoherencia de su flaca y torpe intelectualidad la niegan, desconociendo no solo los hechos veraces, sino negándose a sí mismos y esa es una clara muestra de ceguera intelectual e ignorancia en la que estamos cayendo.

Ahora bien, muy a mi pesar, no podemos continuar en este tema al cual le encuentro un fondo fascinante de gustoso interés y que tendría cuerda para un escrito profundo y extenso, pero por desgracia, no hay espacio y tiempo, de tal manera que continuaré.

Cuando se determina la presencia del alma humana, en la persona; tiene encriptada en los conceptos la existencia de una inmortalidad, y tal vez se trate de la problemática más discutida desde la Antropología Aristotélica; como dice Joseph Gevaert (en su obra El Problema del hombre, Introducción a la Antropología filosófica) ¨ La estrechísima unidad e inseparabilidad del cuerpo y el alma ha sido para los discípulos de Aristóteles el motivo de la negación de la inmortalidad del alma.¨ en la actualidad existen dos debates sobre la unicidad de la persona humana, por un parte reconoce Fraile, en la que manifiesta darse dos interpretaciones las cuales no son satisfactorias, ya que señalan una separación entre el entendimiento o agente de razón y por otra parte el alma como potencia personal.

Por la otra parte se encuentran San Alberto y Santo Tomás que consideran que los dos son parte integral del alma. En la Summa Teológica del Doctor Angélico (Santo Tomás) escribe tal vez la descripción más real para entender mejor la inmortalidad del Alma y de una vez cerrar esta parte, la cual es muy profunda y extensa que como dije antes no tenemos ni tiempo ni espacio pero que no podemos dejarla por fuera, dice el Santo de Aquino, ¨ EL hombre se encuentra, en su cuerpo material generado por sus padres quienes otorgan al nuevo individuo los huesos y la carne ya que son de huesos y de carne, pero en la dimensión espiritual (es decir el alma) es creada por Dios ya que viene de Dios¨ se trata de una clarificación de la integralidad de la persona humana.

De esta dimensión de la espiritualidad humana o del alma es en donde radica los fundamentos del derecho, es decir, esa dignidad de ser un ser humano o mejor dicho, una persona humana es algo absoluto que pertenece a la esencia y en consecuencia radica en la naturaleza humana; es la perfección o intensidad de ser que corresponde a la naturaleza humana y que se predica de la persona, en cuanto ésta es la realización existencial de la naturaleza humana. Así las cosas, según Javier Hervada ¨ la dignidad radical del hombre descansa en su naturaleza racional o espiritual, de esto que la persona humana en su dignidad, significa que se trata de un ser espiritual poseedor de un alma trascendente. ¨

Esto es algo que nunca se nos debe olvidar y de lo que no podemos renunciar. La persona humana posee un alma o una dimensión espiritual. Que su alma es inmortal, es decir, nunca muere, y solo se separa de su cuerpo cuando su cuerpo muere, de esto que muy seguramente cuando muere el cuerpo no hay mayor anhelo del alma humana que reunirse con su cuerpo lo más pronto posible, pero cuerpo y alma reúnen un misterio el cual solo se puede entenderse desde el punto filosófico por eso las ciencias positivas se quedan cortas, muy cortas, en definir al hombre.

Ahora bien, debemos entender que en esa dimensión espiritual o alma en la que se sumergen las potencias dentro de las cuales dan curso a nuestra voluntad y razón, radica la dignidad de ser un ser humano, y donde reside el derecho, fundamental a la vida, a ser libre, derecho a estudiar a tener una familia, derecho al trabajo, es decir, lo que llamamos los derecho fundamentales del hombre consagrados en la carta de la fundación de la ONU del año de 1948. Bueno creo que se contestaron algunas preguntas de la primera parte. ¿Ustedes que creen?

Esto podría decir que es lo fundamental y lo que se nos quiere hacer olvidar, ¿pero porque? ¿Porque nos quieren hacer olvidar esto o que no lo entendamos? ¿Cuál es la razón?
Ya es tarde, más adelante continuo.

Espero dejarlos pensado.

Para mis hermanitos los A.E y los del ENS en especial el glorioso y los pequeñitos de los Martes

C. E. R
Que Dios los bendiga y la Virgen los proteja