viernes, 19 de febrero de 2010

LA FAMILIA UN PEDACITO DE CIELO - 3 PARTE


!LA MUJER¡, UN VERDADERO DON DE DIOS

Y se dijo Dios ¨ No es bueno que el hombre esté solo, voy a hacerle una ayuda proporcionada a él. Y de la costilla que del hombre tomara, formó Dios a la mujer y se la presentó al hombre. El hombre exclamó: ¨ Esto sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne. ¨ Por eso dejará el hombre a su padre y su madre y se unirá a su mujer; y vendrán a ser una sola carne. ¨ (Génesis 2, 21-25) Pocos hemos reparado sobre las cosas escritas que hay para el hombre y la mujer, y muchos de los que lo han estudiado han callado para su propio provecho, otros nos hemos dejado llevar por la corriente del mundo, entre esas las nuevas ideologías del género.

La Mujer en dignidad, poder y gloria, es exactamente igual al hombre. Dios no hizo a la mujer como esclava del hombre sino que se trata de un complemento de soporte, tanto la mujer para el hombre como el hombre para la mujer: tanto es que cuando se unen en Matrimonio conforman una sola carne por lo tanto nadie que sea cuerdo aborrece su propia carne. Sin embargo esto no es así, muchos hombres y mujeres aborrecen su propia carne, y muchos hombres someten a la mujer a una esclavitud, no solo arrebatándole la libertad, sino que la humillan y la envilecen. La dignidad de la mujer es vituperada.

EL Plan de Dios sobre la mujer no es que esta sea esclava del hombre: esto no es justo, ni mucho menos santo, y el Señor es Justo y es Santo; Por eso, todo tipo de discriminación, sea contra el hombre o contra la mujer, con toda seguridad es aborrecible ante los ojos de Dios.

Pero en este mundo, al pequeño lo ignoramos, al débil lo humillamos, al humilde lo despreciamos. Muchos hombres no aceptamos la unidad dentro de la diversidad, cuanto nos cuesta esto, y por ende señalamos, juzgando y hablando de más.

Pero ¿Qué significa la unidad dentro de la diversidad? Bien, significa que el hombre y la mujer forman una unidad, pues los dos pertenecen a la familia humana y, ante Dios, tiene la misma dignidad el hombre que la mujer como lo dijimos antes, y esto es claro porque ambos fueron creados por Dios a su imagen y semejanza.

Los dos se asemejan a Dios en entendimiento y en la voluntad; una semejanza en el conocimiento del bien y del mal, una semejanza que llega al extremo del amor, y es que Dios se hace hombre para que el Hombre pueda ir transformándose en la viva imagen de Dios. Tanto, Tanto nos ama Dios que hasta se ofrece al hombre para esta transformación. En verdad se hace incomprensible.

Pero, es claro que en algunas formas el hombre y la mujer son distintos y esto es lógico para que equitativamente se complementen y los dos puedan formar una sola carne; Dios de alguna manera quiso que así fuera, no solo para la propagación de la especie humana, sino para no romper el equilibrio armónico que existe en toda la naturaleza. No podemos ponernos dos zapatos derechos porque no solo sería incongruente sino que rompería la armonía equilibrada del principio del complemento, de esto que dos hombres o dos mujeres no se puedan hacer pareja de matrimonio.

La unión de los dos, hombre y mujer, se enriquecen de esto que cuando Dios creo al hombre pensó ¨ No es bueno que el hombre esté solo ¨

Bien, mi esposa no está, se fue a un retiro espiritual este fin de semana, así que me despido porque quedé con mi hijo salir a comer.

Gracias, que Dios los bendiga.

Para mis hermanitos y los del ENS en especial el glorioso

C. E. R

Que Dios los bendiga y la Virgen los proteja

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